Tres semanas después de uno de los acontecimientos más aterradores de Ecuador perpetrado por agrupaciones delincuenciales desde que «Alfaro Vive, Carajo» (AVC) secuestrara en su residencia al empresario Nahim Isaías Barquet el 2 de Septiembre de 1985 y que culminó con la muerte del mismo y otros integrantes de la agrupación que se la vinculaba con los grupos guerrilleros «M19» de Colombia y «Sendero Luminoso» de Perú que en esa época pretendían imponer, por fuerza, sus intereses.
Una acción de las fuerzas especiales de la policía ecuatoriana culmina con este evento el cual repercutió en la ciudadanía creando dos opiniones bien contrastadas entre quienes defendían el acto y daban como «daño colateral» la muerte de Isaías y de los que condenaron el hecho de haber incursionado y «dado de baja» a los «alfaristas» sin haberlos aprehendidos y sometidos a un juicio justo e incluso llegaron y hasta la actualidad aseguran que Isaías fue asesinado por la misma fuerza especial.
Lo ocurrido en esa época tiene algunas similitudes con el evento ocurrido el 9 de Enero de 2024, cuando un grupo de personas armadas no mayores a 25 años, según información presentada por la policía nacional, incursionaron en las oficinas del canal TC Televisión en la ciudad de Guayaquil con el fin de dar un comunicado sobre sus actos e intenciones a la ciudadanía, acto que no se dió aunque todo este evento fue transmitido en vivo ya que cuando ocurrió el canal estaba transmitiendo su programación habitual. No hubieron víctimas fatales.
Momentos previos a la incursión a la residencia de Nahim Isaías Barqueet el 2 de Septiembre de 1985, donde muere el secuestrado y varios integrantes de AVC, considerados en un gobierno como un grupo beligerante, aunque hayan cometido actos terroristas.
No es intención narrar lo ocurrido ya que muchos lo presenciaron en vivo y otros se enteraron por diferentes medios digitales, lo que se pretende es comparar hechos ya que ambas situaciones se dieron en momentos en que el país se encontraba y encuentra en circunstancias extremas. Nuevamente se polarizaron las opiniones de los ciudadanos ecuatorianos debido a que esa misma tarde del martes 9, el Gobierno Nacional promulgó el decreto 111 que, resumiendo, da el estatus de terroristas a varios grupos que hasta ese momento, algunos, eran catalogados como agrupaciones sociales pero que se han visto relacionadas e inmiscuidas en actos de delincuencia común y organizada, tanto así que se les endilga secuestros y asesinatos.
Los puntos
Ambos hecho ocurren mientras Ecuador se haya inmerso en una ola de delincuencia que para las épocas y condiciones sociales y económicas se las concidera extrema. En los 80s AVC surge como una agrupación de ideologías «socialistas» pero que apuntaban más al anarquismo pretendiendo con actos de terror amedrentar al gobierno e imponer sus aristas para «beneficio de los más pobre».
Así mismo, desde mediados del 2021 hasta la fecha del hecho en el canal ecuatoriano, muchos actos violentos, sangrientos y sanguinarios se han venido suscitando y aunque despuntan los asesinatos a sangre fría, estos tienen un punto de inflexión ya que en su gran mayoría son personas con antecedentes penales como posesión de drogas, armas, robos a mano armada, etc, lo que lleva a la policía a afirmar que es una «guerra entre bandas por posesión de territorio» o «ajuste de cuentas entre delincuentes» lo que no deja de lado los asesinatos de personas inocentes debido a estar en el momento menos indicado y de las balas perdidas o por el no pago de extorsiones que se vienen dando en alza dese el 2022 que se hizo Vox populi.
El terror infundido es el amalgama que une a estos dos tiempos, tiempos en que las fuerzas políticas, de defensa y judicial se hayan en un embrollo donde sus actores no hacen algo por mediar estos actos.
De saber que uno de los líderes de AVC era hijo de un magistrado de la corte mientras que en la actualidad muchos jueces han sido vinculados con los ahora grupos terroristas y que uno de los grupos, ahora catalogados como terroristas, fue «absuelto» como «agrupación juvenil social» por el gobierno de la «revolución ciudadana» que incluso ganó una curul en la asamblea nacional participando por dicha tienda política.
Otro de los puntos que unen estos eventos son las discrepancias entre los partidos políticos que actúan en la ahora Asamblea Nacional y en la otrora Congreso Nacional, las mismas que no permiten llegar a acuerdos para que el país progrese y se dedican a tratar de imponer sus ideologías sin dar el brazo a torcer haciendo muy difícil a los gobiernos aplicar sus estrategias y aunque haya ocurrido un evento de tal magnitud que sacude a la ciudadanía, los «honorables de la patria» discuten «la mejor manera de hacer la cosas» sin llegar a un punto lo que lo hace un círculo vicioso.
Algunos sociólogos mencionan que el abandono de los distintos gobiernos hace que este tipo de agrupaciones vean en esa brecha la oportunidad de ingresar y ganar así favor la confianza y admiración de las personas ya que llegan con regalos, comida e incluso medicinas, lo que es bien visto por la ciudadanía del sector que aboga por un mejor vivir y que, aunque sean cosas que se financian con dinero ilicito, les es indiferente ya que llegan a satisfacer sus necesidades.
Ambos hechos tienen muchas similitudes que pueden deducir el por qué se.llegó hasta ahí, pero si se tomará el pulso real de las cosas y no vivir en una burbuja donde «solo mis ideas» son las «buenas» entonces, en un futuro, actos similares podrían volver a suceder.
Tomado del diario digital Primicias.ec
Se necesita la unión de quienes dirigen el país hacia una mejora social general.
Suena fácil decirlo pero hay conciencia que es complicado más no imposible. Se ha visto que cuando se quieren cambiar las cosas que se pueden, dejando a un lado ideologías y egocentrismos, se lo hace, y así mismo es complicado mantenerlo, pero hay que ser «tosudo» y todo lo positivo que sea para la gran mayoría hay que mantenerlo.
Actos como los de AVC y de TC Tv no deberían volver a suceder. Hoy muchos ciudadanos aplauden el accionar de las fuerzas militares y policiacas pero que se siguen empañando con el accionar de jueces que con suficientes pruebas para dictar prisión a los involucrados, no lo hacen, por lo que el trabajo aún no termina.
Todos unámonos en esta lucha aportando un grano de arena y demostrar a quienes aún buscan protagonismo y no aceleran las cosas que «querer es SÍ poder»
Que el ñeque acolite a todo el pueblo ecuatoriano para salir de este bache.